Fernanda Bazaldúa, la mejor carta de Saltillo rumbo al 21K Coahuila 2025

A sus 31 años, Fernanda Solís Bazaldúa se perfila como la mejor representante de Saltillo rumbo a una nueva edición del 21K Coahuila.

Pero más allá de marcas, podios o registros, su historia está marcada por la constancia, la pasión y una fuerza interior que la ha mantenido corriendo incluso en los momentos más oscuros.

Desde niña mostró gusto por el deporte, aunque las circunstancias parecían cerrarle puertas.

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“Me encantaba el basquetbol, soñaba con ser profesional, pero un maestro me dijo que era demasiado alta para mi edad y me dejó fuera. Tenía apenas 9 años”, recuerda.

Lo que parecía una desilusión terminó por abrirle paso a su verdadera vocación: correr.

A los 10 años participó en la versión infantil 21K Kids y, aunque obtuvo un quinto lugar, no volvió a competir formalmente hasta años más tarde.

“Corría con mi mamá en el lago de la deportiva, pero lo hacía por diversión, incluso porque al final nos llevaba a comer algo rico”, admite entre risas.

Fue en 2016, en su último año de universidad, cuando encontró en el running una vía de escape al estrés.

Entonces conoció al entrenador Raúl Cerda y se unió a su equipo.

Un medio maratón con dedicatoria especial

Desde ese momento, correr se volvió su estilo de vida.

“No imaginé que algo tan simple como correr me llevaría a tantos lugares ni que se convertiría en una de mis mayores pasiones”.

Para Fernanda, este 21K tiene un valor sentimental agregado.

“Será mi cuarta vez como la mejor saltillense si todo sale bien, pero esta edición es muy especial: la corro por mi abuelita, quien falleció este año.

Su pérdida me dejó fuera de las pistas durante cuatro meses. Volver a competir ahora es también un homenaje a ella”.

La decisión de dejar su carrera como abogada para enfocarse al 100% en el atletismo fue uno de los mayores retos que ha enfrentado.

Pero no se arrepiente: “Correr me ha dado más satisfacciones de las que imaginé. Me ha enseñado que, como en la vida, siempre habrá obstáculos, pero también salidas”.

Fernanda entrena entre dos y tres horas cada mañana, mientras por las tardes equilibra sus tareas escolares —actualmente cursa un diplomado en Ciencias Políticas— y su trabajo online.

Sacrificio y entrega

“Cuando haces lo que amas, no lo sientes como sacrificio”, dice con convicción. Y cita una frase que su entrenador Rodolfo Gómez —atleta olímpico— le repite constantemente: “Hay que dejar los placeres inmediatos por lo que realmente quieres”. Ella lo ha hecho. Día tras día.

Disfruta el ambiente de las carreras por la comunidad que se genera. “Es increíble cómo miles nos reunimos a hacer lo mismo. Al final, correr es unión”.

Aunque también reconoce la exigencia: “El reto físico es llegar sano a la línea de salida; el mental, dar lo mejor sin quedarse con nada”.

Tiene referentes en el atletismo que la inspiran, como los legendarios Kenenisa Bekele y Haile Gebrselassie, la keniana Edna Kiplagat, y su paisana Nora Leticia Rocha, exatleta olímpica que puso en alto el nombre de Coahuila.

Entre sus objetivos está colocarse en el Top 5 del 21K Coahuila y cerrar el año con una gran actuación en el Maratón de Valencia.

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“Mi prueba favorita es el maratón. Solo he corrido tres, pero es una distancia que te transforma, te exige en todos los aspectos”.

Resiliente, comprometida y orgullosa de sus raíces, Fernanda ve cada kilómetro como una oportunidad para demostrar que nada es imposible cuando se corre con el corazón.

ve cada kilómetro como una oportunidad para demostrar que nada es imposible cuando se corre con el corazón.